Angel Francisco Colombo

Angel Francisco Colombo

Pejerreyes en el Barca Grande

Este diecinueve de Agosto decidimos una salida de pesca con mi hijo respetando nuestro muy esperado juego anual juntos, en esta oportunidad la sede del Barca fue la elegida por primera vez. Junto a una barra de amigos llegamos acompañados por un clima espectacular y una temperatura infrecuente. Una vez acomodados los bártulos y preparados los elementos para buscar los "pejes", disfrutamos de los canelones que pasaron ya a ser imprescindibles en nuestras visitas al anexo, gracias y felicitaciones a la Sra. Coirada. Pasadas las 14hs Don Ernesto Posada nos pasó a buscar para intentar en la Boca del Barca, desde que las boyas tocaron el agua el pique fue muy intenso, medianos y chicos se dejaron ver en cantidad, algunos superaron los 500 gramos. En esas tres horas realmente se colmaron todas las expectativas y como broche de una tarde inolvidable un caída de sol en el río que pintó de naranja intenso todo a su paso y la fotografía paso a ser el principal entretenimiento. Héctor Borzone y el Capitán Gaudio lucen felices el resultado de la primer jornada.

Francisco Colombo

 

Pejerreyes en el Guazú

Aprovechando el habitualmente rendidor cuarto creciente, me fui al anexo con la esperanza de sacar mis primeras flechas. Ya el encuentro con los amigos de todos los inviernos resultó reconfortante, quienes comentaron que en el día de la llegada habían sacado un promedio de tres por caña en general de buen tamaño.

Una intensa brisa del oeste no generaba las mejores condiciones en el muelle, que sumado a la acumulación de camalotes hacía muy complicada la pesca, por lo cual aproveché para relajarme dormitando al sol y disfrutando los silencios que el anexo nos regala.

Durante la mañana siguiente se mantenían las condiciones con mayor acumulación de camalotes. Un desayuno en el refugio con queso de campo y miel para acompañar el mate justificaba estar allí en actitud contemplativa hasta que a eso de las 10 de la mañana, para suerte de todos, rotó el viento. Entonces el suave sudeste cambió todo el panorama y prometía algún resultado; hasta el medio día los amigos Horacio Montenegro y Eduardo Cabañez (que luce sus pejerreyes en la foto) compartieron la jornada conmigo y redondeamos la media docena con buenos tamaños promedio, con algunos ejemplares de 500 gramos muy combativos. En todos los casos comió franco a 30/ 35 centímetros de profundidad con mojarra y filet. Este muy buen debut nos dejó felices y como siempre con ganas de repetir.

Por Francisco Colombo

El Pejerrey en la Sede Guazú

El fin de semana después de las lluvias y con la noticia de algún pejerrey tempranero me acerque a la sede a despuntar el vicio, limpiar el armario, revisar que nada falte para las frías mañanas venideras, como para que al inicio de la temporada todo esté en orden.

El sábado bien temprano el día prometía, una densa niebla clásica de esta época, suave brisa del sudeste, agua alta y llamativamente limpia… todo quedó en una buena práctica y reconocimiento del muelle, los pejes no se dejaron ver. Algún lugareño informa que están pasando por abajo, otros que a fondo y pegado a los juncos, lo cierto es que hay que esperar un poco para que el Guazú nos regale pescas interesantes.

Jorge Turner, Juancito Tomaselli y Rodrigo Ayub, intentaron en el Gutierrez, y boca del Bravo, arrimaron a la docena de porte interesante, también allí fueron remisos, pero el clima nos regalo dos días primaverales y una vez más la suerte de disfrutar del anexo.

 

Por Francisco Colombo

Otoño en el Barca Grande

El fin de semana pasado en mi estadía por la sede disfruté de todos los matices de nuestro novel anexo un clima fantástico, los árboles pintados de rojo, ocres y la policromía propia de esta época nos permitió sentir de lleno el cambio de biorritmo que el lugar nos permite, la excelente gastronomía, la paz del lugar, los sonidos de la naturaleza , y los amigos, sentí engordar el alma a veces maltrecha, un lujo, gracias querido Club de Pescadores-

Francisco Colombo